Proceso de maduración
La maduración de la carne es clave para lograr un plato de calidad. Madurar la carne, es dejarla en reposo en cámaras a temperatura controlada entre 15 y 21 días después del sacrificio.
Este proceso hace que la carne se ablande y se vuelva más tierna y sabrosa, de esta manera también nuestro organismo la digiere mejor.
Entre 1 y 4 grados es la temperatura a la que nosotros maduramos nuestra carne, y siempre en seco, es decir, sin envasar piezas al vacio.
Este es un proceso costoso debido a las temperaturas que hay que mantener las canales y la merma de carne que dicho proceso conlleva, pero es esto junto con la manera de criarlos lo que hace que nuestra carne sea diferente, más tierna y con mas sabor.